Desde un punto de vista histórico, nos encontramos ante un enclave de vital singularidad, ya que en este pueblo madrileño se han encontrado vestigios de distintas culturas a lo largo de los siglos: asentamientos prehistóricos, castros celtíberos y romanos.
En la actualidad, dichas muestras culturales pueden ser visitadas por quienes tienen interés en este tipo de cuestiones.
En pleno corazón de está histórica población, entre estrellas e intrincadas callejas, jalonadas de piedra y rodeada de vetustas edificaciones, se encuentra la hospedería La Posada del Camino Real, haciendo alusión al camino que habían de seguir los reyes, en pretéritos tiempos, en su camino desde la Corte de Madrid hasta lugares de descanso "más frescos" en las calurosas épocas estivales del centro peninsular.
Éste, la hospedería la Poisada del Camino Real es un lugar único, un espacio singular y distinto. Cruzar su puerta es cruzar el humbral de la historia, volver a la esencia de lo que somos y lo que fuimos. Sus gruesos muros nos aseguran un ambiente fresco en verano y abrigado y cálido en el frio invierno de la Sierra Norte de Madrid.
Esta hospedería es un edificio, por lo tanto, histórico, sobrio, jalonado con una rica ornamentación castellana en sus dinteles y gruesas sillerias de piedra caliza que forman sus gruesas paredes.
La posada del Camino Real ha querido respetar la tradición castellana. Para ello se conserva el edificio, su estructura, paredes y gran parte de la imaginería y adornos, tal y como estaba cuando se construyó, a principios del Siglo XVII.
Cabe destacar que el edificio se asienta sobre unos túneles que servían, en épocas pretéritas, cuando tenía la funcionalidad de bodega. Este hecho dota a la Posada del Camino Real de un valor añadido, una nueva forma de sentir y conocer cómo eran los antiguos túneles y pasadizos que riegan todo el subsuelo del pueblo de Torrelaguna.
Estos pasadizos se han convertido hoy en una parte más del espacio de la hospederia. De tal manera que podemos saborear la rica y variada cocina tradicional de la región al resguardo de los calores veraniegos en una de estas cuevas, en el subsuelo del edificio.
Esta mágica hospedería de Torrelaguna, se asientaa sobre una antigua bodega o depósito de vinos, de propiedad de la Marquesa de Peramán, una noble de rancio abolengo. Este hecho explica el porqué de los túneles y estrechos pasadizos que podemos disfrutar a día de hoy.
En este lugar encontraremos el esencial y auténtico aire tradicional junto con la modernidad de sus cuidadas y coquetas habitaciones y cuartos de pernoctar.
Un lugar, Torrelaguna y una hospedería, El Camino Real en Torrelaguna de los que hemos disfrutado y en los que nos hemos reencontrado con tantas y tantas cosas al través de los paseos por sus escondidas callejuelas.
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