¿Te gustaría alojarte en un
castillo de verdad? ¿Sentirte como un noble? ¿Disfrutar de la sensación de un
edificio en piedra, original con siglos de historia? Ello ya es posible gracias
a este hotel-castillo singular que te presentamos ahora, de manera sucinta.
Ubicado a las afueras de la
histórica ciudad de Salamanca, se alza un señorial castillo fechado en el SV.
Altivo, recio, hermoso, bello, pintoresco, fascinante y hasta cierto punto
hechizante; se trata del Castillo de Buen amor, un hotel-residencia ambientado
a la perfección en este lugar histórico.
Este hotel es, sin lugar a dudas,
de los más singulares y especiales que podemos encontrar en toda España. No es
solo su ubicación, se trata del edificio en sí. Entrar para alojarnos en
nuestra habitación es cruzar el umbral de la historia, volver en el tiempo.
Armaduras de la época, suelos de
piedra, tapices en las pareces, estanterías y mobiliario de madera, utensilios
de esparto, varias chimeneas originales… mires donde mires podrás sentir que
estás en otro tiempo y quizá hasta en otra dimensión.Un alojamiento del todo distingo y singular que nos hará soñar.
Alojarnos en el Hotel Residencia
Castillo Buen amor es como internarnos en un cuento. Como ser protagonistas de
una historia antigua y olvidada en el tiempo. Es un lugar diferente que transmite
emociones y sentimientos distintos a cuantos hemos sentido hasta el momento.
Pese a ser un edificio antiguo,
los dueños han adaptado todo el edificio en función de las necesidades y el
confort de quienes nos hospedamos en tan histórico lugar. De tal manera que,
por ejemplo, el antiguo foso se ha convertido ahora en una preciosa piscina,
las antaño caballerizas, es ahora un elegante comedor iluminado en las noches
por velas y velones o, por ejemplo, las almenas y las zonas altas del edificio
son ahora maravillosos cenadores para que podamos disfrutar no solo de los
exquisitos platos de la zona, sino también de unas vistas maravillosas.
Actividades como el paseo, ir
descubriendo secretos pasadizos o poder recorrerlos sin riesgo de perdernos, o
incluso leer sobre las distintas vicisitudes de este edificio, son actividades
planteadas por los dueños de este hermoso hotel que, a poco que nos guste la
historia y nos fascine lo singular, podremos ir descubriendo poco a poco.
No, no solo se trata de un
edificio y de pernoctar en éste. Es, en definitiva el sentimiento de toda una
experiencia. Se trata, como algunos afirmaron alguna vez, de la arquitectura de
la historia y de los sentimientos, de las emociones al pisar lugares marcados
por la historia.
Además de las zonas comunes,
decoradas con un gusto exquisito y siempre con muebles de época, diremos sobre
las habitaciones que cada una es distinta al resto. Son espacios, de nuevo,
reconvertidos con una personalidad y unas características diferentes.
Se logra, así, unos espacios
originales, donde nada ha cambiado tras las gruesas sillerías de piedra que
componen las paredes, generando espacios distintos, singulares, cálidos y muy
muy acojedores.
El Hotel Residencia Castillo Buen
Amor es una experiencia única. Una vivencia sublime y distinta a través de sus
espacios históricos y románticos, donde nuestro paso se convertirá, sin duda,
en toda una maravillosa experiencia.
¿Vienes?
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